¿QUIÉNES SOMOS?

Las Artes y las Ciencias n.º 94, un Templo a la Razón

El viernes 11 de diciembre de 2020 ha levantado columnas la Respetable Logia de las Artes y las Ciencias nº 94 de Madrid. Una Logia se eleva gracias a las columnas y este nuevo Taller se ha formado merced a hermanos y hermanas provenientes de otras organizaciones masónicas o que estaban inactivos, con una explícita vocación humanista, racionalista y laicista. 

Hunde sus raíces en la Ilustración y en la época de los grandes descubrimientos científicos, y desde ahí avanza hacia el siglo XXI. Trae a nuestros tiempos una Masonería próxima, pero también exigente y rigurosa. 

La Logia de las Artes y las Ciencias  nº 94 promocionará y llevará a cabo actividades que contribuyan a localizar las vanguardias del pensamiento y conocimiento humano, contribuyendo también a su difusión.

Su trabajo en el Taller se centra en la buena e incansable formación de los masones que sostienen sus columnas. A su vez, defienden los valores de los derechos humanos y de las grandes verdades universales, que estiman es necesario preservar para nuestro tiempo, como legado que nos ha sido transmitido y que debemos, a su vez transmitir, para propiciar próximas generaciones más preparadas, más justas, fraternas y avanzadas.

Círculo de librepensadores operativos, sociales y simbólicos.

Es el taller que nació del manifiesto El Club de los Libres para contribuir a la promoción de las Artes y las Ciencias, en defensa de los derechos sociales, civiles y de la naturaleza.

Trabajando al Progreso de la Humanidad, en un Templo a la Razón, la lógica, cuyos libros sagrados son "El método científico" y la "Declaración de los Derechos Humanos".

Es una logia mixta donde hombres y mujeres trabajan en grado de igualdad. Y es miembro de la Gran Logia Simbólica Española, por eso cuenta con su número 94, un número que sirve de distinción de patente y reconocimiento universal dada por nuestra Orden de la masonería dogmática y liberal y que es reconocida a su vez por todas las potencias masónicas con tratados internacionales.

Una logia azul, que trabaja el Rito Francés moderno, donde a los Aprendices, por coherencia con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, se les reconoció desde su fundación el derecho a la palabra.

Las Artes y las Ciencias también es un parlamento abierto donde poder debatir acerca de los grandes problemas de la sociedad y de las propuestas e ideas para superarlos y contribuir así a una sociedad mejor.

Si la masonería no es social no es nada. Y si la masonería no contribuye a la construcción ética e intelectual de sus individuos tampoco lo es.

La logia se considera Ateneo impulsor, con la vocación puesta en difundir las Artes y las Ciencias.

Las condiciones para pertenecer a ella es que el candidato a ser iniciado en la masonería está dispuesto a perfeccionarse como persona y aportar algo suyo a la Humanidad.

La vocación de servicio público, el sentimiento de fraternidad por los semejantes y la defensa de los grandes valores de la Humanidad son requisitos esenciales de sus miembros.